Si la tapa del diario Clarín publicada el 25 de marzo de 1976, es reconocida como la más elocuente de sus demostraciones de adhesión a la última dictadura en Argentina. Ahora la que resultó impresa el 28 de marzo del 2011, puede ser identificada como la mayor expresión del matutino contra un gobierno democrático. Debido a la carga simbólica que intentó impregnarle al editarla sin textos ni fotos, como si el contenido hubiese sido censurado.
En tanto, el cuerpo del diario desplegó numerosos testimonios de sus habituales voceros, horrorizados ante la protesta que bloqueó las puertas de Clarín. Más algunas reflexiones de intelectuales a fines al grupo, como el caso de la poeta Belén Francese, quien esta vez evitó sorprender a los lectores con sus rimas, para decir: “Es un horror que no haya libertad de expresión”. Mientras tarareaba su tema “EL BAILE DEL POTO”, canción que tampoco pudo ser alcanzada por la censura, ni el buen gusto.
De esa forma, el diario construyó una trágica obra de distracción para no darle voz a quienes lideraron la protesta en su contra. Es decir, los delegados de Artes Gráficas Rioplatenses, Luis Siri y Nicolás Rivero. Los cuales denuncian seis años de lucha frente al matutino de Ernestina Herrera, quien acostumbrada a la impunidad, desoyó las cinco medidas judiciales que le ordenaron la reincorporación de trabajadores despedidos.
Sin embargo, nada de esto les importa a los dirigentes políticos de la oposición, y cumplen sin chistar la tarea de reproducir la versión dictada por la señora Innoble.¿ Acaso alguien esperaba que se encolumnen a favor de los trabajadores? Nadie es ya tan inocente, ni siquiera Belén Francese
No hay comentarios:
Publicar un comentario